Sigue la persecusion a Aidesep - Otros dos líderes nativos piden asilo

Fuente : Diario La Primera

Son hermanos y han sido acusados de apología del delito de sedición, junto a Alberto Pizango. Están desde ayer en la Embajada de Nicaragua. Hay otros dos en la clandestinidad.

Los hermanos Saúl y Cervando Puertas Peña, dirigentes de la Asociación Interétnica para el Desarrollo de los Pueblos de la Selva Peruana (Aidesep), están desde la tarde del último lunes refugiados en la Embajada de Nicaragua, donde solicitaron asilo político tras una orden de captura en su contra por el supuesto delito de apología a la sedición, informó ayer la presidenta en funciones de esa organización, Daysi Zapata, quien demandó el cese de la persecución contra los líderes nativos.Tasha del Pozo, encargada de Negocios de la referida embajada, confirmó que los hermanos se encuentran refugiados en esa sede diplomática y que el gobierno nicaragüense analiza la petición de asilo de los hermanos Puertas, pero todo indica que el asilo procederá, tal como en el caso del líder amazónico Alberto Pizango, quien viajó el 18 de junio a Nicaragua en calidad de asilado. También tienen orden de captura los dirigentes Teresita Antazú y Marcial Mudarra, ellos pasaron a la clandestinidad. Daysi Zapata y otros dirigentes exhortaron públicamente al gobierno peruano a cumplir con el cese a la persecución política de sus dirigentes, la derogatoria de siete decretos legislativos aún cuestionados, la ayuda económica para los heridos del conflicto en Bagua y la devolución de los cuerpos de los fallecidos a sus familias, condiciones planteadas por Aidesep para levantar la protesta iniciada el 11 de abril y continuar el diálogo.

“Nuestras bases nos piden que nos retiremos de la mesa de diálogo. Si el gobierno sigue incumpliendo sus promesas no nos quedará más remedio que apartarnos de las conversaciones”, expresó Zapata.

Asimismo, refirió que sostuvo una reunión con representantes de la
Defensoría del Pueblo que le indicaron que el informe de esta instancia que descarta que en los sucesos de Bagua hubieran desaparecidos, sólo abarcó a un 22% de las comunidades, pues muchas no han sido visitadas.